Cómo cambiar un plato de ducha por otro
¿Notas que tu plato de ducha está deteriorado, anticuado o ya no se adapta a tus necesidades? Cambiar un plato de ducha por otro es una de las reformas más efectivas y sencillas para mejorar tanto la funcionalidad como la estética de tu baño sin necesidad de grandes obras.
En esta guía definitiva encontrarás todo lo que necesitas saber: cuándo conviene cambiarlo, qué tipos existen, cuánto cuesta, cómo se instala paso a paso y qué errores debes evitar.
También te damos respuestas a las preguntas más frecuentes para que tomes la decisión con seguridad y confianza.
Antes y después del cambio de plato de ducha
¿Por qué cambiar un plato de ducha por otro?
Aunque a simple vista pueda parecer un cambio menor, sustituir un plato de ducha puede marcar un antes y un después en tu baño, tanto a nivel funcional como estético. Estas son las razones más habituales que llevan a los propietarios a tomar esta decisión:
✅ 1. Problemas de filtraciones o fugas
Los platos de ducha, especialmente los más antiguos de cerámica o acrílico, tienden a desgastarse con el paso del tiempo. Grietas invisibles a simple vista pueden provocar humedades en el suelo, deterioro de las paredes o incluso filtraciones que afecten a la vivienda del vecino de abajo.
✅ 2. Renovación estética inmediata
¿Tu baño se ve antiguo aunque esté limpio? Un plato de ducha nuevo, con acabados actuales como efecto pizarra, textura de piedra natural o colores a medida, transforma el aspecto general al instante.
✅ 3. Mayor seguridad y accesibilidad
Los modelos modernos incluyen superficies antideslizantes clase C y diseños extraplanos que facilitan la entrada y salida, ideales para personas mayores o con movilidad reducida. Incluso puedes incorporar asideros o bancos integrados para un plus de seguridad.
✅ 4. Cambio de dimensiones y rediseño del espacio
Un cambio de plato también puede aprovecharse para ajustar el tamaño (más ancho o más largo) o para pasar de una forma rectangular a una cuadrada o semicircular, optimizando así el espacio disponible.
Tipos de platos de ducha modernos: ¿cuál elegir?
En el mercado actual existen numerosas opciones que se adaptan a diferentes gustos, necesidades y presupuestos. Aquí te explicamos los tipos más habituales y sus características:
🔹 Platos de ducha de resina y carga mineral
- ✅ Ventajas: Altísima resistencia, tacto cálido, acabado antideslizante natural, posibilidad de personalización en color y tamaño.
- ⚠️ Inconvenientes: Precio más elevado y mayor peso (requiere instalación profesional).
🔹 Platos de ducha de cerámica
- ✅ Ventajas: Económicos, duraderos y resistentes a productos químicos.
- ⚠️ Inconvenientes: Fríos al tacto y más propensos a agrietarse si se golpean.
🔹 Platos de ducha de acrílico
- ✅ Ventajas: Muy ligeros, económicos y fáciles de instalar.
- ⚠️ Inconvenientes: Menor resistencia a largo plazo y estética más sencilla.
🔹 Platos extraplanos o de obra
Cada vez más populares, destacan por integrarse a ras del suelo, eliminando barreras arquitectónicas. También son los favoritos para baños modernos o minimalistas.
Diferentes tipos de platos de ducha modernos
¿Cuánto cuesta cambiar un plato de ducha? Desglose de precios
El coste de cambiar un plato de ducha varía según:
- El tipo de plato elegido.
- Las dimensiones.
- La dificultad de la instalación (fontanería, estado del suelo, etc.).
- La ubicación geográfica (los precios en grandes ciudades suelen ser algo más altos).
💶 Precio medio por tipo de plato:
| Tipo de plato | Precio del material | Mano de obra | Precio total aproximado |
|---|---|---|---|
| Cerámica | 100–250 € | 250–400 € | 350–650 € |
| Resina y carga mineral | 200–600 € | 300–500 € | 500–1.100 € |
| Acrílico | 150–300 € | 250–400 € | 400–700 € |
| Extraplano o a medida (obra) | 500–1.000 € | 500–800 € | 1.000–1.800 € |
¿Cuánto tarda la instalación?
En la mayoría de los casos, la sustitución de un plato de ducha se completa en 1 o 2 días, aunque podría alargarse si se detectan problemas ocultos (por ejemplo, humedad acumulada o necesidad de nivelar el suelo).
Paso a paso: cómo se cambia un plato de ducha
1️⃣ Protección inicial:
Cubrir suelos y muebles para evitar daños. Cerrar la llave de paso.
2️⃣ Retirada:
Quitar la mampara (si la hay), desmontar el plato y limpiar la zona.
3️⃣ Fontanería:
Revisar el estado del sifón y la conexión de la válvula de desagüe. Reparar si es necesario.
4️⃣ Nivelación y colocación:
Instalar el plato asegurando la pendiente correcta para un desagüe eficiente.
5️⃣ Sellado y acabados:
Aplicar silicona sanitaria alrededor del plato y recolocar la mampara (o instalar una nueva).
6️⃣ Pruebas finales:
Comprobar que no hay fugas y dejar secar bien la silicona (24–48 h recomendadas).
Errores comunes y cómo evitarlos
- ❌ No comprobar la nivelación: provoca que el agua no escurra bien y genere charcos.
- ❌ Elegir solo por estética: la seguridad y la durabilidad son igual de importantes.
- ❌ Silicona de mala calidad: aumenta el riesgo de fugas prematuras.
- ❌ Saltarse la revisión del desagüe: puede suponer tener que romper el plato nuevo en el futuro.
¿Quieres pedir presupuesto?
Preguntas frecuentes
¿Es posible cambiar el plato sin dañar los azulejos?
✅ Sí, aunque requiere precisión. Un profesional sabrá cómo desmontar el plato respetando las baldosas existentes.
¿Necesito permiso para cambiar un plato de ducha?
No, salvo que vivas en una comunidad con normativas específicas, este tipo de reforma menor no requiere licencia.
¿Qué mantenimiento necesita un plato nuevo?
Limpieza semanal con productos no abrasivos y revisión de las juntas de silicona anualmente.
¿Cuánto tiempo debo esperar antes de usar la ducha?
✅ Lo ideal es esperar al menos 24–48 horas para que la silicona cure completamente.
¿Se puede aprovechar para cambiar la mampara?
✅ Sí, y de hecho es lo más recomendable si la mampara es antigua o no se ajusta bien al nuevo plato.
También te puede interesar
